HOTEL CECIL; parte I: Terror y misterio envuelto en el barrio rojo de Los Ángeles

90 años de historia que no dejan indiferente a nadie. Crímenes, suicidios y fantasmas escriben reputación del Hotel Cecil

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PARTE I

UNA SINIESTRA INVITACIÓN 

Un lugar con más preguntas que respuestas. Los valientes se aventuran, con curiosidad, a un hotel teñido de sangre de los muchos que han pasado por allí. Muerte, crimen y misterio son sus compañeros constantes.

Bienvenidos a la inquietud del Hotel Cecil, situado en la 640 S. Main Street, Los Ángeles, se fundó en 1924 por tres empresarios hoteleros que querían el lujo para el hotel. Un edificio de 19 plantas con 700 habitaciones pequeñas, pero cómodas, enfocadas a viajeros y empresarios de alto nivel adquisitivo que vendrían de paso a la gran ciudad.

Se inauguró en 1927, pero la expectativa de sus dueños no durarían mucho tiempo, pues, solo dos años después, vino la gran crisis económica para muchos países, el “”Crack del 29” el jueves negro para Wall Street, ese día marcó un antes y un después del Hotel Cecil, día uno de su camino negro.

En el Hotel Cecil, sabías cuando haces el check-in, pero no el check-out

Cronología de muerte del Hotel Cecil

Desde entonces, los dueños se vieron obligados a abaratar precios, ofreciendo también estancias más largas. Sus huéspedes más habituales eran hombres, personas que lo habían perdido todo. La ciudad se vio envuelta en las drogas, la violencia, prostitución y el crimen, muy pronto los huéspedes, escribirían la historia del hotel con sus muertes. Muchos suicidios inauguraron su mala reputación.

Dentro de esta cronología, únicamente están reflejadas las muertes, pero no los asesinos que también dormían allí.

El Hotel Cecil en los años 40 ya no pudo aguantar su reputación, lo bautizaron como «El hotel del Suicidio». Tras la crisis del 29, muchos se vieron obligados a vivir en la calle y los que todavía podían permitirse unos días, semanas o meses elegían el Cecil. Las mujeres que antes buscaban la fama en L.A., ahora eligieron prostituirse y el hotel podía ser un buen sitio para trabajar. Se convirtió en un lugar sin ley, si te hospedabas ahí, significaba que no tenías muchos recursos y entre los huéspedes no se hacían preguntas ni querían averiguar si pasaba algo en alguna habitación.

El asesinato más sonado en la ciudad y en aquellas épocas, fue en 1957 Elisabeth Short, una joven aspirante a actriz, joven y bella que no sabía que quizá por haber estado en el Cecil, puso su vida en peligro.

Cuando llegó a Los Ángeles, después de sus problemas familiares, tuvo un novio formal con el que iba a casarse con un soldado llamado Matt Gordon, pero este falleció en un accidente aéreo, y eso llevo a Betty Short a hundirse en una vida de alcohol y la visita a club nocturno. La vieron por última vez en el bar del hotel Cecil. Desapareció y después de 5 o 6 días, una mujer con su hija, pronto por la mañana, creyó ver en un descampado un maniquí partido en 2, pero al acercarse vio que era el cuerpo de una mujer cortado por la mitad. Le cortaron el torso por la mitad a la altura del ombligo, le sacaron los órganos internos y le rajaron las mejillas desde la comisura de los labios hasta las orejas, dibujando una macabra sonrisa en su rostro, lo que ahora podríamos conocer como» la sonrisa del payaso”.

La llamaban la Dalia Negra, por sus vestimentas siempre de ese color y su pelo teñido de negro, además la película de moda de esa época era La Dalia Azul, una historia de crímenes. Crearon a lo largo de los años una película sobre su asesinato y su caso, se nombraba en numerosas series.

Hubo 22 sospechosos, pero no se encontraron pruebas concluyentes, algunos dicen que podría haber sido víctima de una «Snuff Movie» es decir, un asesinato filmado, ya que la encontraron limpia de manchas de sangre, el pelo lavado y la manicura hecha. Además, se descubrió por los forenses que era hermafrodita, sus órganos genitales no estaban de todo desarrollados era una malformación de nacimiento y esa pudo ser la razón por la que podía ser bastante codiciada por ello.

Haciendo un salto al año 1964 La mujer de las palomas, Goldre Osgood, una mujer de 79 años, querida por todos los que la conocían en el barrio. Era conocida, entre otras cosas, por bajar a dar de comer a las palomas. Su alojamiento era de larga estancia por no tener recursos, ya llevaba unos años en el hotel. La encontraron en su habitación, apuñalada, violada y estrangulada, además de robarse sus objetos de valor. Una muerte que conmocionó a todos, solo podía ser obra de una mente oscura y macabra, como en el caso de Elisabeth Short.

Entre estos casos, siguieron los suicidios y seguramente muerte de prostitutas, pero eso no le preocupaba a la policía, no era noticia, era un problema menos para la ciudad, así de triste. Durante aquellos años el Hotel Cecil se vio rodeado a escasos metros del centro de L.A., por Skid Row, el barrio donde los sin techo, prostitutas, traficantes, enfermos mentales, y asesinos que se fueron multiplicando.

Hasta aquí 37 años de historia del Hotel Cecil, donde el misterio abunda, la locura te atrapa. Seguiré escribiendo sobre los casos más sonados de 90 años de historia.

La Dama Desconocida